Las batatas, originarias de América se conocen en Canarias al menos, desde 1544.
“Batata de Lanzarote” o “Colorada”, de piel rojiza y oscura y carne de rosa pálido a blancuzca, de forma alargada e irregular, de sabores bastante dulces y producidas en verano.
“Batata blanca” o “Conejera”, de piel parda y carne blanquecina, forma larga, elíptica, menos dulce que el resto, con producción repartida a lo largo de todo el año.
“Batata yema de huevo” (“Patagallina” o “Empinada Roja”), de piel anaranjado claro, de forma oblonga, carne amarilla y de sabor muy dulce, con producción en invierno, menos abundante que el resto. Muy usada para elaborar las “truchas”, unas empanadillas dulces deliciosas.